Efemérides: un 4 de julio del 2015 Chile se convertía en el Campeón de América

La Selección Nacional ganaba por primera vez el título sudamericano venciendo por penales a la Argentina de Lionel Messi

La Selección Chilena alcanzó la gloria en la Copa América 2015 siendo el duelo ante la albiceleste el coronario a una campaña que no supo de derrotas y que dejó al equipo del técnico Jorge Sampaoli como el más goleador y con mejor fútbol del certamen.

El camino comenzó el 11 de junio en el Estadio Nacional, recinto donde Chile cuajó toda su campaña. Ese día viernes, el elenco nacional se vio complicado por el duro cuadro de Ecuador y ganó por 2-0. De hecho, el marcador recién se desniveló en el segundo tiempo. Primero fue Arturo Vidal, quien cambió un penal por gol y luego Eduardo Vargas los que cimentaron un triunfo que comenzó a alimentar el sueño.

La segunda estación de la ruta a la gloria fue ante México. Pese a que el combinado azteca era un ‘equipo B’, complicó de sobremanera a Chile y probablemente en su peor partido terminó igualando 3-3. Matías Vuoso abrió la cuenta para los norteamericanos, pero Vidal logró la paridad con un cabezazo apenas un minuto después. Raúl Jiménez le devolvió la ventaja al ‘Tri’, pero Vargas y Vidal desequilibraron para Chile, no obstante, Vuoso repitió y marcó la decisiva paridad.

Si las dudas futbolísticas fueron grandes, se agigantaron cuando tras el partido, Arturo Vidal fue formalizado tras chocar su Ferrari en estado de ebriedad en la jornada libre posterior al partido. El jugador se disculpó con sus compañeros y con los hinchas en una lagrimeada conferencia de prensa, y Sampaoli decidió mantenerlo en el plantel pese a que muchos pedían su salida del plantel.

En la última fecha, Chile entró clasificado, al igual que su rival de turno, Bolivia. Y ese relajo permitió que el elenco rojo mostrara su mejor versión venciendo por 5-0 al cuadro albiverde con anotaciones de Charles Aránguiz (2), Alexis Sánchez, Gary Medel y un autogol de Ronald Raldes.

Los duros enfrentamientos ante Uruguay y Perú

Chile pasó en el primer lugar del Grupo A y en esa condición debió enfrentar a uno de los mejores terceros y la suerte deparó que fuera el duro elenco de Uruguay. El partido fue sufrido, con polémica de por medio, con un gol casi agónico y que provocó un desahogo en los 17 millones de hinchas chilenos.

Todo partió con Edinson Cavani palabreando al juez de línea, por lo que se ganó amarilla. En medio de un segundo tiempo bravo, Gonzalo Jara provocaría al mismo delantero y el uruguayo vio la segunda amonestación y se fue expulsado. Jara salió libre de polvo y paja, pero luego de la denuncia de la Asociación Uruguaya de Fútbol se ganó dos fechas de suspensión, perdiéndose los dos últimos partidos. Con ventaja numérica, Chile se mantuvo presionando la portería oriental y cuando los charrúas clamaban por los penales, un disparo de Mauricio Isla sentenció el 1-0. Un grito de gol que recorrió toda estrecha faja de tierra.

Luego vino la sorpresiva selección peruana. Con buen fútbol, el cuadro adiestrado por Ricardo Gareca asomaba como un rival de cuidado pese a que la historia estaba a favor de Chile. Los mismos seleccionados peruanos llegaron henchidos de orgullo tras su buena campaña, pero la temprana expulsión de Carlos Zambrano pareció alivianar la labor de los 11 guerreros chilenos.

Un gol de Eduardo Vargas sirvió para distender el ambiente, pero un autogol de Gary Medel silenció el Nacional, no obstante el delantero nacido en Renca volvió a demostrar su calidad frente al arco y con un golazo le dio la victoria a Chile ante un Perú que no se rindió pese a jugar con uno menos.

En la final el rival fue Argentina. Un equipo lleno de estrellas, pero Chile lo controló y tras 120 minutos de lucha, el cero se mantuvo hasta que en penales, donde, el elenco nacional supo quedarse con la victoria por 4-1. Con la notable actuación de Claudio Bravo y las brillantes anotaciones de Matías Fernández, Arturo Vidal, Charles Aránguiz y Alexis Sánchez desataron la locura en el Estadio Nacional.